Esta mañana me siento extraño, no es que tenga pocas ganas de hacer nada (ultimamente un hecho habitual en mi persona), o que me halla costado horrores levantarme por la mañana (otro constante en mi vida) si no que estoy como fuera de mi. Es posible que sea un flashback tardío de la Salvia, o que sea debido a la botella de vino de 1,69€ que me trague ayer, juntamente con un cacho de queso de cabra (al fin, queso de cabra en este país de queso de vaca) y a una manzana, pero teniendo en cuenta quien soy, cual es mi pasado, y adonde me dirijo, es harto difícil que ese sea el motivo. Es posible que sea simplemente que a 29 de Junio tengas que llevar chaqueta y no olvidarte el chubasquero en casa (mierda de clima), o a la conjunción de dislexia mental causada por las excesivas lecturas de editoriales afines al Partido, que simplemente eche de menos la felicidad de Paracuellos, o este debido al eterno runrún de los congeladores (en el trabajo, en casa, creo que en el ipod se ha instalado un virus que suena como un compresor de nevera). También podría ser causado por la reiteración hasta el infinito y la saciedad de las canciones que suenan en la radio formula preferida de Flandes (vaya mierda). O es que simplemente la sensacion de que todo es un gran error, y que el que mueve los hilos ha decidido que este año me toca ser su bufón preferido (sin habérmelo comunicado, ya no que te lo pida jejejeje) esta llegando al clímax (que no al orgasmo). Total, que no se si salir o venir... o como iba la canción?
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